Un espacio concebido para la difusión de la literatura del Archipiélago, dirigido al público general y a los profesionales de la enseñanza. En la ficha de cada autor, realizada en tono divulgativo por conocidos especialistas, podrás acceder a sus datos esenciales: quiénes son, sus obras, su significación cultural y literaria, bibliografía, recursos multimedia y una selección de sus textos.
Por Sinesio Domínguez
Dramaturgo, narrador de novelas y cuentos, ensayista y articulista, siempre residió en Santa Cruz de Tenerife, pero nació en Barcelona durante un viaje de la familia a esta ciudad.
Allí estudió Medicina, pero regresó al finalizar el primer año y se matriculó en La Laguna donde hizo la Licenciatura de Filosofía y Letras. Fue profesor de la Facultad de Filología durante casi veinte años.
En el Prólogo de Los puercos de Circe, Interinsular Canaria, 1983, Daniel Duque escribe que en una entrevista publicada en El Día el 22 de septiembre de 1974, Luis Alemany confesaba a su entrevistador, Juan Cruz, que “mi formación cultural y literaria es teatral”.
En efecto, desde 1961 en que dirigió Tres sombreros de copa, de Miguel Mihura, pasando por las ediciones de sus cuentos El indulto (1964), de los contenidos en su libro Beneficio de inventario (1995) y otros, y hasta su novela Los puercos de Circe (1973), la trayectoria literaria de Luis Alemany se ha apoyado siempre en esa formación teatral, en el humor, sobre todo en el de color negro y azconiano, y en el sarcasmo y la crítica social de una burguesía algo rancia a los gustos de ahora. Es el cronista oficial de una época, la de los años 70, que él retrata con trazos precisos, plenos de sátira y sal fina. Con estos elementos y, formalmente, con el diálogo y las acotaciones de los decires y acciones de sus personajes, Luis Alemany ha conseguido recrear un mundo algo pacato y provinciano y con ello el reconocimiento de su valía no solo en las islas sino también a nivel nacional.