La Academia Canaria de la Lengua, fundación pública dependiente del Gobierno de Canarias, tiene entre sus objetivos fomentar y estimular el estudio científico de todas las modalidades lingüísticas canarias, aconsejar en todo lo que atañe a la enseñanza del español en el Archipiélago, organizar o propiciar cursos sobre nuestra variedad regional y colaborar con las entidades educativas y científicas tanto en lo que concierne a la enseñanza de la lengua materna, como en lo que se refiere a su uso en los diversos ámbitos de la vida y del conocimiento (art. tercero de nuestros Estatutos). En esta línea, la Academia Canaria de la Lengua (en adelante, ACL) ha impulsado desde su creación diversas actividades y proyectos que tienden a promover el mejor conocimiento y el uso normalizado de nuestra variedad dialectal. Puede ver una muestra de estas actividades en la página web de la Institución.

Con respecto a la colaboración con instituciones de América Latina, la ACL mantiene una relación fluida con la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE) a través de su secretario general, D. Francisco Javier Pérez, que ha sido invitado y ha participado en varios ciclos de conferencias organizados por la ACL. El último de estos ciclos se celebró el pasado mes de abril (puede verlo en este enlace: https://cicloconferencias.eventosendirecto.es/).

Además de ello, algunos miembros de la ACL, como los profesores José Antonio Samper y Juan Manuel Pérez Vigaray, tristemente fallecidos en fechas relativamente recientes, o Marta Samper, han formado o forman parte de proyectos de investigación lingüística en coordinación con numerosos grupos de investigación de España y de América. Los ejemplos más destacados son el Proyecto de la norma culta hispánica Juan M. Lope Blanch (conocido como PILEI), el Proyecto para el estudio sociolingüístico del español de España y América (PRESEEA) y el Proyecto para el estudio de las creencias y actitudes hacia las variedades del español en el siglo XIX (PRECAVES XXI). Dentro de cada uno de ellos, se estudian las peculiaridades lingüísticas del español canario, así como las actitudes que muestran los hablantes isleños hace su propia variedad y hacia otras, y se establecen contrastes entre las distintas modalidades hispánicas. Todo ello redunda en un mejor conocimiento de la variedad dialectal canaria y en la difusión de dicho conocimiento a la sociedad en general.