rastrero, ra
1. adj. GC. Ganguero, que pretende por sistema comprar a bajo precio. U. t. c. s. Resultaba difícil ganarle un duro porque era muy rastrero.
rastrillazo
1. m. Golpe fuerte que se propina a alguien. Le pegó un rastrillazo sin balón ni nada, y el árbitro ni pitó falta.
2. m. Exabrupto que se dice a alguien. Por menos de nada te suelta un rastrillazo, que te deja sudando.
ratiñar
1. v. Lz., GC. y Tf. Escatimar, tacañear, quitar. Tenía fama de ratiñar en el peso.
ratiñero, ra
1. adj. Lz. Que escatima lo que debe dar. Presumía de generoso, pero en realidad era muy ratiñero.
ratiño, ña
1. adj. GC., Tf. y LP. Que escatima lo que debe dar. U. t. c. s. Hasta con sus hijos era un ratiño.
2. adj. Tf. y LP. Escaso, corto, que no alcanza la medida o el peso justo. Se puso una blusita ratiña que apenas le llegaba al ombligo.
ratón
1. m. (Myliobatis aquila) Raya de hasta 20 kilos de peso que posee un aguijón venenoso en la base de la cola. Vive sobre fondos de arena, en mar abierto, aunque en verano se aproxima a la orilla a parir. Suele capturarse con cordeles, trasmallos, cazonales y palangres, aunque carece de valor comercial. Con los ratones que cogíamos, hacíamos tollos, pero no eran muy gustosos.
2. m. Fv. Piedra suelta en el fondo del mar, que puede romper el arte de pesca cuando se está calando.
ratonero, ra
1. adj. Fv. y GC. Se dice de cierta raza de perro, de tamaño pequeño, pelo corto y muy ladrador. Tengo un perrillo ratonero que es una fiera para cuidar el ganado.
2. m. (Parus caeruleus) Variedad de herrerillo común, de unos 12 centímetros de longitud, con la parte superior de la cabeza, el dorso, las alas y la cola de color azul oscuro. Las partes inferiores son amarillas y los carrillos blancos, con una lista negra a través del ojo y la nuca. Se alimenta básicamente de insectos y pequeñas semillas. En algunas zonas de Canarias se conoce también con los nombres de alegría, cabrestillo, chirre y frailero.
3. m. (Buteo buteo insularum) Ave rapaz de unos 50 centímetros de largo y de 120 a 140 de envergadura, que habita en las laderas de los riscos, barrancos o zonas boscosas. Su plumaje es de color marrón, con la parte inferior de listas blanquecinas y moteada de oscuro. Hace su nido en las paredes rocosas de los barrancos y acantilados, y en él pone 2 o 3 huevos, que incuba durante unos 30 días. En algunas zonas de Canarias se conoce también con el nombre de aguililla.
4. f. (Forsskaolea angustifolia) Planta de la familia de la urticáceas, perenne, de hojas lanudas por el envés y bordes espinosos, y de flores pequeñas y rosadas. Es una especie endémica de la región macaronésica, muy común en zonas de costa y de medianías. Posee propiedades medicinales. U. t. c. adj. Con una mata de ratonera se hizo un agüita.
rayadero
1. m. Rayador.
rayador
1. m. GC., Tf. y LP. Palo o tablilla que sirve para rasar las medidas de los áridos.
rayar
1. v. Igualar con el rayador las medidas de los áridos.
2. v. Anotar los tantos ganados en el juego de la baraja, con granos o piedritas, que se cogen del montón situado en el centro de la mesa. Yo me encargo de rayar, que tú eres muy olvidadizo.
3. prnl. Llenarse los ojos de lágrimas, arrasarse. Cuando le nombraron a la madre, se le rayaron los ojos.
rayo, ya
1. adj. Tf. Raso, lleno hasta el borde. Le puso tres almudes rayos.
realejero, ra
1. adj. Natural de Los Realejos, municipio de la isla de Tenerife. U. t. c. s. El ilustre realejero Viera y Clavijo es el máximo exponente de la Ilustración en Canarias.
2. adj. Perteneciente o relativo a este municipio. En las fiestas de la Cruz, los vecinos de dos calles realejeras organizan una gran exhibición de fuegos artificiales.
rebambaramba
1. f. Contienda ruidosa, trifulca. Al terminar la verbena, se armó tal rebambaramba, que tuvo que intervenir un grupo de policías.
rebarba
1. f. Fv. Arista o borde saliente de una cosa. Le quitó una rebarbita que tenía en el filo, y lo alisó con una lima.
rebate
(estar) de rebate. Con preocupación. Estos días está de rebate porque viene toda la familia a quedarse en la casa.
2. m. Lz. Sin descanso. Debe de ser que comió algo que le hizo daño, porque se pasó toda la noche de rebate: de la cama al baño y del baño a la cama.
